Boda en Tarifa  Hotel La Residencia y Finca el Campo  (Cádiz)

Con María y Jorge quedamos unos días antes de su Boda en Tarifa, para que nos contasen detallitos que habían organizado. Nos gusta saber en todo momento qué es lo que va a pasar en la boda, para no ser unos meros espectadores en busca de una fotografía. Nos gusta formar parte de la boda desde el primer momento, ser uno más en la boda, en ese día tan especial.

Pues bien, desde aquella tarde (días antes de la boda en Tarifa) ya supimos que la boda en Tarifa de María y Jorge no iba a ser una boda en Tarifa convencional, sino que sería… ¡¡¡una pedazo de fiesta!!! ¡La fiesta del amor!

Ellos decidieron pasar la noche de antes en el hotel donde se vestirían la mañana del gran día, Hotel & Spa La Residencia, un hotel de apenas un año en pleno corazón de Tarifa, entre el puerto y el caso histórico y con unas vistas al Estrecho de Gibraltar… ¡impresionantes!

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PREPARATIVOS DE LA BODA EN TARIFA EN EL HOTEL & SPA LA RESIDENCIA.

HABITACIÓN 304. HOTEL & SPA LA RESIDENCIA, TARIFA.

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María estuvo acompañada en todo momento de su madre, Paqui, un verdadero encanto de mujer que sabía en cada momento qué decirle a su niña para calmar los nervios. La complicidad que hay entre ambas se palpaba en el ambiente. Las dos se miraban, y se entendían a la perfección. Y de vez en cuando un… “Divine!”

Lo primero que les dijo María a las chicas de Pronovias fue: “una buena raja en la falda… ¡hasta arriba!” Y es que a personalidad, no le gana nadie. De novia típica, clásica, tradicional… ¡nada! Fue una novia que en cada detalle de su vestido y sus complementos dejó bien marcada su propia personalidad. Súper coqueta y ¡espectacular! Y no podían faltar ¡labios rojos! Como decíamos… muy “chica del cable”.

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Habitación 109.
Jorge, acompañado de sus padres y su sobrino. El momento en el que Jorge comenzó a vestirse fue sin duda, uno de los momentos especiales para él, y es que, lució con orgullo el uniforme de gala de la policía, siguiendo los pasos de su padre.

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CEREMONIA DE BODA EN TARIFA, IGLESIA DE SAN FRANCISCO, TARIFA, 12’30H.

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La iglesia está situada en una plazoleta pequeñita, en pleno casco histórico. Nosotros la conocíamos porque alguna vez hemos pasado por fuera en las sesiones de pre o postboda y hemos parado ahí a hacer fotos porque tiene una buganvilla a un lado que es preciosa.

Jorge llegó acompañado del brazo de su madre, la madrina, con una espectacular mantilla negra. No podía parar de sonreír, se le veía nervioso. Poco a poco, fue saludando a sus compañeros, que le hicieron el pasillo a la entrada de la ceremonia.

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María tardó en llegar ¡los 10 minutitos de rigor en una novia! Llegó en un espectacular escarabajo antiguo celestón, que nos daría mucho juego horas más tardes en las fotos. Con una sonrisa de oreja a oreja, fue saludando a los asistentes, hasta que llegó un momento que se quedó en la puerta sin saber que hacer. Veía tanta gente esperándola dentro que hasta el pasillo de la iglesia ¡lo vio estrecho! Como nos dijo ella: “me quedé esperando en la puerta porque pensaba ¡que no cabíamos por el pasillo!”. Jorge mientras tanto, emocionado, no podía dejar de mirarla.

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La ceremonia fue preciosa y muy emotiva, destacando la lectura que hizo el padre de Jorge. Hubo un momento que miramos alrededor, y no había persona que no estuviese emocionado, ¡hasta a nosotros se nos escapó alguna lagrimilla! Y es que muchas veces, más vale ser breve en este tipo de lecturas, pero hablar directamente desde el corazón.

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A la salida, el arroz (nuestra parte favorita), con su tradicional pasillo de sables, para honrar a los recién casados. ¡Sables en arco!

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Tras la salida dimos una vueltecita y hacer un poco de tiempo y aprovechar ya que nos encanta una boda en Tarifa y dar un poco de tiempo para que los invitados llegaran a la Finca El Campo en Algeciras.

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CELEBRACIÓN DE LA BODA EN LA FINCA EL CAMPO, ALGECIRAS (CÁDIZ)

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La celebración tuvo lugar en la Finca El Campo, uno de los lugares por excelencia de la zona donde la comodidad y la profesionalidad reinan en el ambiente. A nosotros nos encanta volver una y otra vez, porque tiene tantos rinconcitos donde poder sacar fotografías chulas… que no hay vez que vayamos que no descubramos alguno nuevo.

El cóctel estuvo amenizado por Rafa Gutiérrez, que participó en el programa de La Voz. Gran parte de la familia de Jorge es de Isla Cristina (Huelva), por lo que durante todo el cóctel, no dejaban de sonar los temas de Manuel Carrasco. Faltaba poquito para que el cóctel terminara, y empezaron los temas más movidos. ¡La gente ya empezó a darlo todo! No había persona que no estuviera cantando. En este momento, nos miramos y dijimos: ¡esta boda promete! La diversión y la fiesta estuvo muy presente durante toda la boda.

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También hubo momentos muy emotivos, instantes en los que no podían dejar de pensar en personas especiales que no podían acompañarles en un día tan importante. Y es que, nosotros, era mirar a María abrazada a su madre, a su hermano, su abuela… y no podíamos evitar emocionarnos. Como le oímos decir a una de las invitadas: “¡ni en la boda de mi hijo lloré tanto como hoy!”

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Llegó el momento del baile… ¿qué canción eligieron? ¡La de Oficial y Caballero! Up Where We Belong. ¡No podía ir más acorde con la boda!

Aquí fue donde comenzó ¡la auténtica fiesta! Con la actuación de un grupo de la zona, Mala Manera, ¡que anima las fiestas como ellos solo saben! ¡No había persona que no estuviese bailando dándolo todo!

Y, ¿que cómo acabaron? ¡Pues todos en la piscina! ¡¡¡Eso es señal de que no pudieron pasarlo mejor!!!

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María, Jorge… no tenemos palabras para describir lo que vivimos con vosotros en el día de vuestra Boda en Tarifa. Lo vuestro no tiene nombre. Vuestra boda en Tarifa fue una auténtica fiesta, donde celebrasteis vuestros amor a más no poder, rodeados de las personas que más queréis. Gracias por hacernos partícipes de vuestro amor. Sois realmente especiales, con un corazón precioso.

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Os habéis ganado a pulso un huequito en el corazón de “La Pepa”.

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Love lift us up where we belong
Where the eagles cry
On a mountain high
Love lift us up where we belong
Far from the world we know
Where the clear winds blow